Mi lema:

"Sucede, que cada vez que pierdo un perro, se lleva un trozo de mi corazón con él. Y cada perro que entra en mi vida, me regala uno del suyo. Si logro vivir lo suficiente, todas las partes de mi corazón serán de perro y llegaré a ser tan buena y generosa como lo son ellos."

domingo, 13 de enero de 2013

Un perro, es un perro

Los perros, son nuestros amigos, nuestros compañeros de piso, nuestros hijos, nuestros hermanos, pero antes que todo eso, son perros.
Yo respeto a todos los animales por igual, simplemente porque son seres que tienen necesidades.
En el caso de los perros, tienen muchas necesidades, pero en muchas ocasiones, les otorgamos mas de las que tienen.
Un perro, necesita hacer pis, caca, comer, cariño, ejercicio,socializarse, higiene, sanidad...los perros, son muy básicos.



Cuando un perro llega a casa, lo primero que debemos saber es que es un perro y que necesita tener su espacio y no invadir el nuestro, sino saber que es su casa, pero que no es el dueño de ella.
En mi opinión, si cuando tenemos un hijo...al tiempo ya no duerme en nuestra habitación...¿por qué los perros se quedan? Me parece super importante otorgarle un lugar para él, un lugar suyo en el que pueda descansar y sentirse seguro, pero sin invadir el nuestro.

En segundo lugar, debemos saber que su pelaje está capacitado para abrigarle y para expulsar el agua de lluvia. En algunos casos de frío extremo podemos cubrirlo con un abrigo, pero un perro no es un muñeco a quien comprarle un ropero...no porque no esté bien o mal (no entro a juzgar gustos) sino porque no lo necesita. Tampoco es sano "pasear" a un perro en un bolso ni en un carrito, ya que un perro debe caminar, ejercitarse y lo mas importante...socializarse.

Y por último y no menos importante, debemos tener muy claro, que un perro, por ley de vida, morirá antes que nosotros, ya que su ciclo termina antes y debemos tomarlo como es, como un fin de ciclo. En muchas ocasiones, los vemos como hijos y obviamente no se acepta, porque no es ley de vida que un hijo muera antes que un padre, pero recordemos que no es nuestro hijo, sino nuestro perro.

Porque tratemos a nuestro perro, como un perro y no como una persona, no hace que lo queramos o respetemos menos, sino todo lo contrario. Mas que les pese a muchos, un perro, no es una persona y su psicología no es la misma, ni sus rutinas, ni sus saludos, ni sus interacciones. Tratar a un perro como tal, le hará estar psicológicamente sano y será mucho mas feliz, sabiendo que lugar ocupa y cuál es su papel. Mientras tenga cubiertas todas sus necesidades básicas, él será feliz.

"Los perros son, casi siempre, como los humanos los hacemos" (Anónimo)

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